Etapa 4.
Unidad
1.
Sesión 2.
Actividad 3 Ser estudiante en ambientes
virtuales de aprendizaje.
Actualmente hemos transitado a la sociedad de la información
y a la sociedad del aprendizaje que incorporan los ámbitos virtuales donde los
estudiantes son los protagonistas y responsables de su aprendizaje.
El uso de las Tecnologías de la Información y la
Comunicación (TIC) han venido a transformar la forma en como interactuamos,
pero, sobre todo, la manera en cómo aprendemos.
El proceso educativo se enfoca más al aprendizaje que a la
enseñanza, incorporando actividades y experiencias estimulantes para la
autogestión y la colaboración.
Los docentes, requieren desarrollar habilidades para
advertir las características individuales y disminuir los obstáculos en el
entorno virtual. El docente brinda apoyo y orienta, motiva y anima, modera y es
guía durante todo el proceso, valora y da seguimiento al logro de objetivos y
competencias, interpela para provocar y elevar el nivel de discusión en el
grupo; contribuye a la resolución de dudas y convierte en áreas de oportunidad
las situaciones de aprendizaje.
El estudiante en el nuevo entorno virtual adquiere
competencias para el aprendizaje autónomo, a través de líneas que demandan su
reflexión y creatividad, donde el aprendizaje colaborativo es fundamental, pues
se trata de aprender del otro y con el otro, por lo que se requiere
cooperación, tolerancia y respeto, pero, sobre todo, implicación que lleve a
desarrollar actitudes proactivas y autónomas; le permiten contar con tutoriales
e información para el autoaprendizaje, no espera a que el docente le indique lo
que tiene que hacer; toma un papel activo al involucrarse en el proceso como
responsable de su aprendizaje; promueve la autocrítica en la dinámica grupal.
La flexibilidad da paso a la autorregulación; otorgar un
papel protagónico dentro del proceso educativo. Existe la facilidad de
compartir las dudas mediante el foro grupal o por mensajería interna. El
estudiante interactúa de manera síncrona o asincrónica con el docente y con los
compañeros de grupo, interactúa con los contenidos y con sus compañeros para
construir el conocimiento y ampliar sus experiencias; y pueda buscar fuentes de
información adicional y obtener material de estudio extra para aumentar las
posibilidades de extender y enriquecer sus conocimientos, aprenda a hacer un
uso crítico de la información y buscar la confiabilidad de las fuentes. Adoptar
una actitud crítica y creativa frente a las Tecnologías de la Información y la
Comunicación.
Será sin duda alguien que aprenda a aprender para la vida, a
tomar decisiones acertadas, a resolver problemas y a innovar en el mundo en el
que se desenvuelve. Aprender a ser autogestivos, autocríticos y reflexivos.
Convertirnos en alfabetas digitales, trabajar con diversas
fuentes y códigos; discriminar la calidad de las fuentes. Implica el tránsito
de una visión heterónoma donde el alumno sigue instrucciones a una visión
autónoma donde se responsabiliza y es parte del proceso de construcción del
conocimiento dialogando con los otros, todos construyen a partir de
aportaciones personales y la reflexión que se comparte.
Pero todo esto constituye que el estudiante en línea debe
cumplir con los siguientes requisitos sobre sus capacidades y habilidades para
tener un buen desempeño y cumplir con la meta deseada.
Actitud proactiva. Debe
disponer de un amplio margen de libertad y autonomía, que le permitirá tomar
decisiones respecto a su aprendizaje y desempeño.
Compromiso con el aprendizaje. Ser responsable de su aprendizaje, pues se convierte
en un agente activo y autogestor del mismo.
Conciencia de las actitudes, destrezas, habilidades y
estrategias propias. Aprender a aprender; para lo cual
tendrá que generar y potencializar estrategias que le faciliten la recepción y
el análisis de la información en cualquier momento.
Actitud para trabajar en entornos colaborativos. Tiene la oportunidad de conocer a diferentes personas,
lugares, estrategias de estudio e historias de vida de las cuales puede
aprender y enriquece el propio proceso cognitivo.
Metas propias. Establecer
metas y buscar alternativas de solución en caso de tener inconvenientes, los
límites los pone uno mismo.
Aprendizaje autónomo y autogestivo. Generar destrezas relacionadas con la comunicación, la
búsqueda, la selección, la producción, la difusión de la información y el
conocimiento.
Es necesario que los sujetos adquieran nuevas habilidades y
competencias que les permitan tener el juicio crítico necesario para buscar,
seleccionar, analizar, procesar, comunicar información, transitando de una
educación racional a una integral. Esta nueva manera de aprender requiere de un
compromiso serio con nosotros y con los otros.
De
igual manera se extienden las habilidades a desarrollar individualmente para
avanzar con éxito en este modelo educativo como es:
·
Identificar, controlar y manejar
nuestras emociones y reconocer cómo reaccionamos para adaptarnos a las
circunstancias. Comprender y responder con empatía para atender y entender los
requerimientos de apoyo que hagan nuestros compañeros, saber tratar a los
demás, influir positivamente, motivar e inspirar al grupo, trabajar en equipo y
mejorar la manera en la que nos comunicamos.
·
Cuestionar, replantear, investigar e
idear nuevas formas de descubrir, con el impulso de seguir explorando y generar
la oportunidad para obtener más conocimientos. Analizar y procesar la
información para apropiarnos del conocimiento y proyectar nuestro saber.
·
Adaptarse al trabajo en un entorno
cambiante, valiéndose de la creatividad, la comunicación, la colaboración y la
resolución de problemas.
·
Gestionar y administrar el tiempo, que
nos permita programar todas las actividades a realizar.
·
Potencializar nuestras habilidades de
lectura y escritura. Fortalecer la comunicación escrita, ampliar los
conocimientos relacionados con la gramática, la sintaxis y la semántica.
De
esta manera nos enfrentamos a un nuevo modelo educativo que es más exigente con
el estudiante convirtiéndolo en el centro del estudio, y así ser profesionales
altamente competitivos.